Las obras de construcción de la piscina municipal de Tineo han provocado el hundimiento de parte de la calle Pablo Iglesias. Los vecinos de los bloques de edificios colindantes advirtieron la semana pasada de la presencia de grietas en la travesía, cercana al parque de bomberos y al recinto ferial. El pasado viernes, el Ayuntamiento decidió prohibir el tránsito como medida de precaución.
La sorpresa llegó anteayer por la tarde, cuando se produjo el hundimiento. El Ayuntamiento tinetense estima que las dimensiones del socavón alcanzan los 18 metros de ancho por 20 de largo. Semejante oquedad ha llevado al gobierno local a prohibir totalmente el tráfico rodado y peatonal por la zona.
A primera hora de la mañana de ayer, el alcalde de Tineo, Marcelino Marcos Líndez (PSOE), mantuvo una reunión con la dirección de la obra de la piscina en la cual se acordó tramitar «medidas de urgencia» para evitar que el socavón alcance mayores proporciones.
La compañía adjudicataria del complejo deportivo, financiado con cargo a fondos mineros y con apoyo económico del Principado, se encargará de colocar rieles de hierro para garantizar la estabilidad del terreno y de la travesía y también construirá las escolleras necesarias para reponer el vial.
El derrumbe se produjo a escasos metros de un bloque de viviendas en el que residen de forma habitual 18 familias. Parte del vecindario se quejaba ayer de la «falta de previsión del Ayuntamiento». De hecho, la comunidad de vecinos ha tramitado una denuncia ante la Guardia Civil y la Policía Local, después de celebrar una asamblea el pasado domingo. Antes del suceso ya habían tomado sus propias precauciones. «Decidimos sacar todos los coches del garaje ya la semana pasada», comenta Carmen Menéndez, una de las inquilinas del bloque de viviendas mas cercano al socavón.
El Alcalde aseguró ayer que el proyecto de obra cumple con todos los requisitos legales y técnicos e indicó que en los sondeos de prospección previos al inicio de los movimientos de tierra no se detectaron problemas. Marcos Líndez indicó que el derrumbe podría tener su origen en los continuos chubascos registrados el pasado fin de semana, que pudieron hacer más movedizo el terreno o bien en «la filtración de algún colector de la travesía».
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